martes, noviembre 12, 2013

PAN Y CIRCO 2.0

Se cierran las campañas políticas de Chile este 2013 y fueron muchos los "artistas" que dijeron presente con algún abanderado. Obviando el color o tendencia política que sea, esta cercanía entre política y arte, si bien data desde siempre, habla de dos cosas claras. 1. El poco espacio para que los artistas puedan expresarse, sin miedo a decir lo que piensan y 2. cómo tras llevar una carrera que apunta a un sitio claro, todos parecen estar dispuestos a "negociar" sus ideas. Cuando una expresión artística se pone al servicio de un tercero, pierde toda la fuerza libertaria que lleva en su núcleo. ¿Por qué? Porque la expresión de cada ser humano al crear es un proceso íntimo de percepciones, apreciaciones y postulados. Si todo eso juega para un tercero pierde la potencia intrínseca que posee. Hablar de casos como el de "Méndez" (llamado anteriormente "DJ Méndez), o el de varias sonoras que están como cabezas de cartel en los show de cierres de campañas o en las giras nacionales, no hacen más que confirmar la tesis anteriormente expuesta. Si el fin de la creación está puesta al servicio de la disuasión masiva en torno a una tendencia política, va por un muy mal camino. Artistas contratados que cobran millones por un show u otros miles que son capaces de subir a un escenario teñido de un color sólo por masificar su estilo o decir "nosotros también somos esto", es atentar directamente con la libertad creativa. Quizá, podrá postular uno por ahí, es una visión de un Periodista que cree que la autogestión es la expresión máxima de la libertad. El "Do it Yourself" ("Hazlo tú mismo") como bandera no te lleva a grandes escenarios ni a la masividad. Pero te lleva al contacto directo con tu auditor, tu visitante, tu lector o tu seguidor. Esa alma que encuentra en tú expresión algo que no podía decir antes, algo que no podía graficar con imágenes, o plasmar en palabras. Esa unidad pocos la conocen. Varios la han transado por unos pesos. Y muchos añoran con tenerla. Esa unidad se va directamente a la basura cuando la expresión se tiñe de un color. "Al pueblo, pan y circo" decían los romanos. Hoy no hay pan para todas las bocas (hay familias que llegan con hambre a fin de mes), pero el circo a evolucionado y entra por todos lados. Está en una nueva etapa. El circo es el centro. Y en él todo payaso es bienvenido. Buenas votaciones...

jueves, octubre 24, 2013

LAS ENCUESTAS...Y LA INDUCCIÓN MASIVA...

Bachelet arrasando, Matthei luchando codo a codo por una segunda vuelta con Parisi y tooooodooo el resto ni siquiera aspirando a una posición medianamente valorada en la clase política. ¿Pero alguien ha visto la índices de la gran cantidad de personas que no responden, no saben o prefieren no ser parte de la encuesta? Ese es el miedo de la clase política. Hablar de esos desfavorecidos, quienes no tuvieron tiempo de responder porque estaban en sus trabajos de 10 o 12 horas, quienes justo en ese momento debían hacer dormir a sus hijos, alimentar a su familia y seguir inmerso en un sistema que sólo individualiza la lucha diaria de cada ciudadano. Porque para triunfar debes saber moverte en aguas turbias, donde quienes te palmotean la espalda no son amigos y quienes te felicitan no son tus seguidores. Nadie apoya a nadie. Esa es la imagen que poderes políticos, económicos y sobre todo mediáticos se encargan de imponer. Una coalición ligada a etapas oscuras de nuestro país que tiene 2 candidatos, otra que es capaz de unirse a todos quienes quieran un pequeño espacio en el futuro Gobierno, y una gama de representantes tan variopintos como sus ideas que sólo añoran con cambiar el acceso al orden existente, para poder participar de la misma fiesta, comer de la misma torta y disfrutar del mismo poder. ¿Cambiar de raíz todo? ¡Ni pensarlo! Blasfemia contra la estructura que tan bien nos protege, dándonos la opción de surgir donde queramos y crecer donde deseemos. El libre mercado te da la opción de hacer lo que desees y surgir, para ser uno de "ellos", "los de arriba", "los poderosos", quienes tienen las riendas económicas del país. Y el ciudadano cree. Calla. Sigue. Esperando el "golpe de suerte". La inducción masiva se ha logrado, el mensaje homogéneo y directo ha llegado a su nicho. Masas silenciosas guiadas como ovejas por su pastor. Esa imagen se impone. ¿La realidad? Absolutamente opuesta. Ciudadanos organizados que marchan por una idea. Proponen cambios en colectivos. Se las ingenian para manifestarse y, estando dentro del orden ofrecido, logran poner sus temas en la agenda mundial. Capuchas y gritos, bailes y cantos, piedras y movilizaciones. Todas tienen su razón de existir. Su génesis. La espontaneidad en las opiniones del ciudadano no es real. Cada una de las manifestaciones y frases puestas en las bocas de los miles que a diario salen a batallar por comer tiene un origen. Orígenes como la desigualdad, las injusticias, los excesos y por qué no, el hastío. Son esos ciudadanos quienes deben cambiar la historia de Chile. Desde el encapuchado que destruye todo a su paso de forma irracional, a la mujer que intenta detenerlo e invitarlo a otras formas de manifestación. Desde el joven que está endeudado con sus estudios al que no pudo estudiar por las deudas previas en su familia. Del profesional exitoso que logró destacar entre sus pares al que no pudo ejercer su profesión porque la economía nunca le dijo la verdad. Del Periodista que escribe en internet en un perdido blog al Comunicador que día a día trabaja en la masividad y dentro del sistema. Ellos, los otrora silenciosos y cada vez más ruidosos ciudadanos son quienes deben cambiar el país. En las urnas, en las calles, en sus familias, en sus barrios, en sus condominios, en sus poblaciones, en su vida... Ellos tienen el poder. Nosotros tenemos el poder. Es hora de ocuparlo a nuestro favor y despertar. Ah! no conteste el teléfono, seguro el encuestador pondrá lo que más convenga al poder. Hasta pronto...